Las ventajas de elegir nuestra residencia

Cuando llegamos a ciertas edades, en las que ya ni podemos estar solos ni queremos molestar a nuestros familiares, lo mejor es solicitar una plaza en una de las mejores residencias de mayores. En la Residencia Avenida San Luis, te ofrecemos muchas ventajas y servicios, para que puedas disfrutar de tu estancia aquí.  

Atención médica especializada: como queremos lo mejor para nuestros residentes, ofrecemos servicio de enfermería las 24 horas, fisioterapia y rehabilitación para los residentes que necesiten un tratamiento especifico, al igual que cuidados paliativos o atención a persona con Alzheimer o demencia.

Entorno tranquilo y agradable: Para vivir sin sobresaltos, hay que hacerlo en una zona tranquila, en la que se pueda respirar aire puro, con buena accesibilidad y dotada de todas las comodidades. Lo que más nos preocupa es ofrecer a nuestros residentes una estancia tranquila y relajada, porque somos un equipo de profesionales que nos dedicamos por entero al cuidado de nuestros mayores, porque lo más importante para nosotros es que las personas ancianas tengan una buena vejez.

Queremos que se sienta como en casa: Porque no a todo el mundo le gusta vivir de la misma manera y porque cada anciano es un mundo, disponemos de habitaciones individuales y dobles, equipadas para el mayor confort de nuestros mayores con las mejores comodidades. En nuestra residencia ancianos, todas las habitaciones disponen de aire acondicionado, televisión, baño adaptado, teléfono, camas articuladas, llamada de emergencia en el baño y en la misma habitación… No hacemos nada al azar y no dejamos que nada nos pille de improviso: por eso conseguimos dar un buen servicio a las personas que viven en nuestra residencia.

Los mejores servicios: Nuestra prioridad son nuestro residentes, por eso les ofrecemos los mejores servicios; ente ellos: dietas y menús personalizados (siempre bajo supervisión médica), para que cada uno coma lo que puede y no lo que no debe. Además disponemos de una capilla para que los que quieran rezar o recibir la eucaristía, puedan hacerlo, sin necesidad de ser trasladados a una iglesia.

Con más de veinte años de experiencia a nuestra espalda podemos garantizar que  más de quinientos pacientes han sido y son felices en nuestras instalaciones, porque lo primero para nosotros es que nuestros mayores estén bien, a gusto, tranquilos, atendidos y sobre todo felices. De nada sirve tener un centro de mayores en el que los ancianos no se sientan a gusto, como en casa. 

Cuando una familia se ve obligada a llevar a uno de sus mayores a una residencia de ancianos lo único en lo que piensa es en su bienestar: si va a estar bien atendido, si lo van a tratar bien, si lo alimentaran en condiciones, si se tomara la medicación… En nuestra residencia tratamos a todos con mucho cariño y respeto.