Centros de día para mayores: todos los beneficios

En una sociedad cada vez más envejecida (y con un pronóstico mucho más amplio en unos años) es de crucial importancia poder encontrar soluciones que puedan satisfacer a nuestros ancianos.

Una alternativa asistencial para poder disfrutar de la vejez en condiciones (ya que no todos los ancianos cumplen los requisitos para poder o vivir  solos o estar en una residencia) son los centros de día para mayores. 

¿Cuáles son los beneficios de los centros de día?

1- Libertad

Uno de los principales inconvenientes que nos encontramos cuando internamos a nuestro anciano en una residencia es que tiene que dejar atrás su hogar y todo el entorno conocido. Una situación que, si no se lleva con delicadeza, puede incluso suponer un empeoramiento de su salud y generarle hasta episodios depresivos.

Los centros de día están a medio camino entre el cuidado asistencial y una residencia, consiguiendo unificar los beneficios de ambos; el anciano no abandona su hogar y recibe una asistencia profesional.

2- Sentirse parte de un grupo

Con los centros de día, el anciano deja de sentirse excluido. Cuando vamos cumpliendo años la mayoría de nuestro círculo social se reduce y nos vemos limitados a esperar la visita de nuestros familiares; a veces el anciano siente que todo el mundo a su alrededor tiene cosas que hacer (estudios, trabajo, viajes…) y siente que es una carga para los demás. En un centro de día para mayores puede sentirse lleno de vida, encontrar actividades que le motiven y nuevas amistades.

3- Disfrutar de las numerosas actividades de los centros de día

En estos centros podremos encontrar un gran abanico de opciones como bailes de salón, juegos de mesa, actividades guiadas… Nuestros mayores podrán invertir su tiempo en algo que le agrade aprender, haciendo cosas nuevas mientras comparten experiencia y charlas con personas que se encuentran en la misma situación que ellos.

Generalmente los equipo de profesionales del centro acuerdan un “mapa de vida” con la familia, basado en las actividades, preferencias y costumbres que tenga el anciano en su vida diaria. Este se adecuará a la autonomía del anciano (si se vale por sí mismo para hacer la mayoría de las actividades o necesitará algún tipo de  ayuda).

4- Cuidados personalizados

Otra ventajas de los centros de dia es que están formados por un equipo multidisciplinar pensado para ayudar a los ancianos tanto a nivel físico como cognitivo. Encontraremos médicos, pedagogos, trabajadores sociales o fisioterapeutas.

Estos centros son también espacios muy recomendables si nuestro mayor está empezando con fases leves de demencias o Alzheimer ya que, además de encontrarse en un entorno controlado, gracias a las numerosas actividades que se le ofrecen en los centros de día, no dejará de esforzarse y utilizar sus capacidades cognitivas.

5- Ventajas para las familias

Las familias llevarán de manera mucho más sencilla el cuidado de sus mayores (al no tener que estar pendientes las 24 horas de día) lo que les ayudará a sobrellevar la situación con mejor ánimo.

La “tranquilidad” es otra ventaja a tener en cuenta: saben que dejan a su ser querido en las mejores manos. En los centros de  día, los profesionales no solamente cuidarán de los mayores sino que le brindarán todos las herramientas para poder frenar la degeneración física o cognitiva, así como un lugar en el que socializar y hacer nuevas amistades.